Atienden a más de tres mil con VIH

Actualmente, en los tres Centros Ambulatorios para la Prevención y Atención en Sida e Infecciones de Transmisión Sexual (Capasits) se brinda atención a tres mil 115 pacientes con VIH/Sida.

El 42% de los pacientes reciben atención en el Capasits León, es decir, mil 320; el resto están distribuidos en los centros de Celaya con mil 22 (32.8%) e Irapuato con 773 pacientes (24.8%).

El 80% de los pacientes atendidos en León son hombres, el resto mujeres; la mayoría tiene entre 18 y 45 años y, de enero a noviembre de este año se diagnosticaron 130 casos nuevos de VIH, la mitad en etapa avanzada, es decir, en Sida.

“Es algo que no hemos podido cambiar porque no tenemos la cultura de hacernos nuestra prueba de VIH cada año, así como nos debemos hacer el examen de glucosa no lo hacemos a pesar de que es gratuito en los centros de Salud. Es algo que se deja al último y acuden a atención cuando la enfermedad está muy avanzada”, lamentó la doctora Gutiérrez.

Estos centros cuentan con personal capacitado para ofrecer atención integral con servicios de infectología, enfermería, nutrición y psicología a pacientes que no están afiliados al IMSS o ISSSTE.

La principal vía de transmisión es la sexual, en el 98.4% de los casos, seguida de la transmisión perinatal con el 0.38 %; la mayoría de las personas portadoras de VIH tienen entre 15 y 49 años.

La detección oportuna permite al paciente iniciar un tratamiento de medicamento antirretroviral que junto con otros cuidados de salud le permitirá tener una buena calidad de vida.

“La discriminación limita el acceso a los pacientes, mina su autoestima. El hecho de que una familia no acepte a su propio familiar es devastador y por eso el lema “¡Igualdad ya! es algo que lo denota, el virus del VIH no discrimina, nos puede infectar a cualquiera. No entiendo porqué nosotros discriminamos”, expresó Eva Gutiérrez.

En los Capasits se brinda atención de lunes a viernes de 7 de la mañana a 9 de la noche y se otorgan medicamentos a quienes no cuentan con IMSS o ISSSTE, mientras que las pruebas gratuitas de VIH, sífilis y hepatitis C se practican a cualquier persona sin importar su derechohabiencia.